En cuanto entramos al templo nos damos cuenta de que el exterior no tiene nada que ver con el interior del templo. El exterior es neorrenacentista y el interior tiene estilo neogótico.
Tiene planta de cruz latina y está dividida en tres naves. Sobre las paredes blancas destacan algunas pinturas de color, así como el techo de efecto de pan de oro.
El altar de mármol verde es una gran belleza, así como el “Cristo crucificado”, barroco que destaca sobre el fondo del altar y la cúpula central decorada con un cielo estrellado.
Los siete murales representan los misterios más importantes de la salvación, y componen la llamada "corona de los misterios". En el centro destaca el Cristo en actitud majestuosa y severa, una pose que evoca el arte de las iglesias ortodoxas, y tiene en su mano un libro abierto donde se lee la inscripción: "Amad a vuestros enemigos. ¡Vengo pronto!”. Esta frase se refiere al día en el que Cristo regresará a la Tierra para el Juicio Universal.
Bovéda y el órgano
Santisima Trinidad
Altar Mayor visto desde el altar de la Vigen de la Almudena
Altar de la Virgen
La Virgen el la Puerta Central de la Catedral el día de su festividad
Con respecto a las catedrales, de otras ciudades es bastante moderna y su estilo corresponde al de su tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo
Es moderna. Tardaron muchos años en dotar Madrid de una Catedral . No tiene el sabor de las otras que tienen siglos de historia. Pero eso si tien para siempr el que la ha consagrado Juan Pablo II. Gracias Antonia😘
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