Castrillo de los Polvazares es uno de esos pequeños pueblos de España con encanto, situado en pleno corazón de la Maragatería cerca de Astorga (León) y forma parte del Camino de Santiago.
El pueblo en un principio se encontraba en una ubicación distinta pero fue destruido por unas riadas, y se reconstruyó en el siglo XVI en su emplazamiento actual y se conserva casi en su totalidad en su estado original.
Castrillo de los Polvazares fue la localidad elegida por la escritora Concha Espina para ubicar su novela La Esfinge Maragata, en la que rebautiza al pueblo como "Valdecruces". Otra personalidad relacionada con este pueblo es René Clair, cineasta francés, cuya mujer vivió allí hasta su muerte en 2006.
Desde 1980 está declarado por el Consejo de Ministros como Conjunto Histórico-Artístico de alto valor monumental.
Tengo que confesar que para mi fue una sorpresa. Nunca había oído hablar de él y si de su famoso cocido maragato que tuvimos la ocasión de degustar en uno de sus muchos restaurantes.
Espadaña de la Iglesia
De sobra conocida es mi "cariño" por las puertas y ventanas que además elegí como mi avatar.
Aqui os dejo una muestras bellísimas al menos para mí.
Comimos en el restaurante Casa Cascolo. Se trata de una casa antigua “arriera” rehabilitada para este fin, como casi todos los restaurantes del pueblo.
Allí nos comentaron que los habitantes de Castrillo fueron tradicionalmente arrieros maragatos, cuyo oficio era el comercio y de ahí que las casa estaban estructuradas en función de esa actividad, existiendo grandes puertas para el paso de carros, patios interiores que son el centro de organización de la casa, cuadras, y algunas grandes bodegas.
Y por supuesto degustamos el famoso "Cocido Maragato" que es uno de los más tradicionales de la comarca. Se trata de un cocido que tradicionalmente alimentaba a los trabajadores del campo.
Consta de tres vuelcos que se sirven alrevés. Se empieza por las siete carnes, a continuación con los garbanzos y la verdura, para terminar con la sopa ¿Por qué se come el Cocido Maragato al revés?
“Cuando los maragatos, recorrían las tierras de España como arrieros, llevaban entre los utensilios necesarios para sus largos desplazamientos, una fiambrera circular de madera con su tapa también de madera, donde guardaban en ella porciones de carne de cerdo cocida, que se conservaba fresca cierto tiempo. Al llegar a las posadas o mesones comían primero lo que ellos llevaban en las fiambreras de madera, por supuesto alimetnos fríos, y para terminar y "entonar" sus estomagos pedían al mesonero o al posadero una sopa o caldo caliente.”
Así es como lo explican las personas mayores de los pueblos maragatos arrieros, que lo vieron comer en ese orden a sus padres y a sus abuelos cuando regresaban de los largos viajes, introduciendo así en sus familias la costumbre de comer el cocido maragato al revés.
Nada que ver con las leyendas que circulan en torno a esta paradoja, en las cuales se cuenta que cuando los franceses andaban por estas tierras en ele siglo XIX, ante una inminente batalla optaron por degustar pimero la carne y después por último, si les daba tiempo la sopa, ya que era preferible que sobrasen la sopa y los garbanzos, que las preciadas carnes.
Pasamos una tarde muy agradable paseando por este bello pueblo. Si tenéis ocasión no os lo perdáis.
Castrillo de los Polvazares II
Castrillo de los Polvazares III
He estado unosdias fuera y al llegar veo que por fin has vuelto, pero tu cuantas veces te vas de vacaciones?
ResponderEliminarEstos pueblos tienen un encanto especial y mucho mas si eres tu quien nos los muestras.
Un abrazo
Hola Chelo, cualquier cosa llamas tu vacaciones. Me suelo ir dos semana al año divididas o sea una semana en Mayo y otra por estas fechas. Lo que ocurre es que me cunde:)
ResponderEliminarLos post son mis viajes a lo largo de una vida (Que exageráaaa)
Alguna que otra salida si que hacemos
Bss y buen finde
Amiga Katyyyyyyyyy, tu llenas todos mis rincones: con tus imágenes, con tus viajes, tus palabras. tus consejos, tus recetas de comida, de licores, de postres, y un largo etc. Poemas, literatura, consejos para mejorar la vida, salud....
ResponderEliminarTu blog es mi enciclopedia.
Gracias por compartir.
Un abrazo y feliz fin de semana.
Jecego
Conozco Castrillo de los Polvazares, aunque el cocido lo comí en Astorga, me pareció un manjar y eso que no es mi plato favorito, allí no quedó nada nos lo comimos todo.
ResponderEliminarLa impresión que tuve de este fue fue un poco desilusionante, no porque no sea bonito, sino porque me habían hablado tanto de él que me defraudó, porque no vimos a casi nadie por la calle dando la sensación de ser un museo.
A pesar de ello, me parece interesante visitarlo, no siempre tienen que coincidir las impresiones de unos y de otros.
Para terminar, un leonés me dijo que el cocido se come así porque a alguien se le ocurrió y al ver el tirón turístico lo han singularizado como el cocido maragato.
No sé quién dice la verdad.
Katy, parece que te llevo la contraria.
Un abrazo y buena digestión.
Gracias Isidro por tus bellas palabras que llenan mi "ego" Menos mal que se que son tan hermosas porque eres muy generoso. Sé que no me merezco tanto, pero te lo agradezco de corazón.
ResponderEliminarBss
Hola Valverde genial tu comentario y lo agradezco. Diferentes puntos de vista dan para cambiar impresiones. Es cierto en parte lo que dices, porque ya ves que en las fotos no hay nadie. Pero ello a mi juicio no le quita encanto al pueblo, al contrario favorece las fotos:)
ResponderEliminarEl cocido nos lo comento la guia luego en Astorga que se come así porque antiguamente la gente llevaba lo solido en sus desplazamientos y se comía aquello primero para después en las posada pedir una sopa para calentarse el estómago. ¿Será verdad?
Mi teoría es que como en casa nadie quiere la carne del cocido la unica forma que se lo comieran sería ponerlo de primero.
Asi que ya ves no estamos tan equidistantes.
Las percepciones ciertamente son diferentes.
Un abrazo
La verdad es que cortan la respiración. Excelente. España nunca dejará de sorprenderme por su riqueza arquitectónica, cultural y gastronómica. Un fuerte saludo.
ResponderEliminarDesde luego es difícil encontrar poblaciones en las que se puedan ver tantas calles en su estado original, sin ninguna reforma moderan que lo afeen. Quizás sea por lo que dice el amigo Valverde: la poca gente. Sea como sea, parece un lugar bonito, del que había oído hablar, pero que no conozco.
ResponderEliminar...y como no, para hincar el diente, no podías dejar de poner la nota gastronómica, cosa importante en cualquier viaje. Besos Katy.
Bonito pueblo, sorprendente su arquitectura.
ResponderEliminar¡Este pueblo Invita al descanzo!y lo complementas
con excelentes platos.
Feliz fin de semana
Un abrazo
Hola Katy!! Qué lugar hermoso!! Me encantaron las fotos y los detalles de puertas y ventanas, a mi también me gustan. Los platos parecen exquisitos.
ResponderEliminarCompleto para un paseo bello y sabroso.
Feliz domingo!!
Un beso grande
Hola Katy, la verdad no se como le haces para encontrar lugares tan especiales y bellos, este lugar es magnífico. Las fotografías que nos entregas preciosas.
ResponderEliminarUn gusto pasar por tu espacio querida Katy.
Besos.
Que post tan bonito. Unas calles encantadoras. A uno le entra ganas de visitar ese lugar, y de probar ese cocido, comiéndolo al revés si hace falta. Impresionante fotografía que ha hecho que hoy tenga que comer garbanzos si o si. Un placer pasarme por aquí, y descubrirte. Un beso.
ResponderEliminarAcabop de desayunar, pero me está entrando un hambre....Buf, que envidia, y curiosa la referencia a comer el cocido al revés, aunque no carece de lógica.
ResponderEliminarBesos¡
Me alegro mucho que te gustara Garcibanez. Un placer tu comentario. España ya sabes es diferente siempre, y cada rincón nos sorprende favorablemente
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Dlt, a mi desde luego me sorprendió gratamente. Nada más bajar y ver la entrada me gusto y luego el doble al ver toda la arquitectura original y las calles de todo el pueblo. Y el cocido ni te cuento. Habre que había lo demás es historia:)
ResponderEliminarUn abrazo
Veo Gabriela que has captado a la perfección mi sentir. No han hecho falta mi¡uchas palabras. Da gusto viajar con amigos como los que seguís este blog.
ResponderEliminarBss y buena semana
Gracias Rosa por tu paso. El pueblo es bellísimo y sin aglomeraciones.
ResponderEliminarY los platos geniales. Tomados en una de estas casas con larga historia saben a gloria.
Bss
Hola Aída creo que soy tan afortunada que los pueblos y lugares me encuentran a mi. Pienso
ResponderEliminarque mi amor por el Planeta y mi intuición me ayudan a captar estas vibraciones.
Me encanta leer estos comentarios tan cariñosos. De corazón gracias.
Bss
Muchas gracias Ignacio por la visita y por pasear conmigo por este bello Pueblo de la comarca de León. Te lo recomiendo para mi fue muy gratificante.
ResponderEliminarEspero que te queden rico los garbanzos.
Bss
Genial, despues de desauyan tomarse unos garbanzos aunque sean virtuales como que nó.
ResponderEliminarPero el pueblo merece la pena. Las fotos están sin retocar. Lo maravilloso es que las casas tienen ese color.
Te recomiendo un paseito si tu¡ienes oportunidad.
Bss
Auténtico lujo de pueblo, todo de piedra y típicamente meseteño; no lo conozco pero queda anotado. Y de la comida, mejor no hablar. Un abrazo, Katy.
ResponderEliminarSi que lo es Paco. Además tiene el mérito de la buena conservación. está cuidado y limpio. No dejan pasar coches salvo el de los residentes. Me alegro que te lo hayas apuntado.
ResponderEliminarEstá a unas cuatro horas desde Madrid 337 Km. Y tan solo 5 de Astorga.
Un abrazo
Precioso pueblo y contundente plano. Así da gusto viajar. Yo tampoco retoco mis fotos. Son como son. Opino que si se retocan ya no son fotografías, sino otra cosa. Un saludo
ResponderEliminarBuenas noches, hice ese apunte por resaltar el color de las casas que es real y me parec precioso. Pero además no tengo ni idea de usar el photshop ese. Confieso que a veces me encantaría usarlo;)
ResponderEliminarFeliz semana
Te admiro, Katy. Te admiro y te quiero. Para cuando sea mayor quiero parecerme a ti y poder guisar y llevar adelante media docena de blogs, viajar y hacer reportajes como el de hoy con unas fotos tan preciosas... ¡Y yo con estos pelos!
ResponderEliminarBesos
Hola Katy: no conozco el pueblo por lo que te agradezco el trabajo, así podré visitarlo algún día. Las fotos magníficas como siempre; como apuntan por ahí no utilices el photshop, así son más auténticas( lo único por si tienes necesidad de limpiar alguna mota de polvo o algún pelillo, para eso sí es práctico, pues si haces alguna ampliación es bueno limpiar la foto; además es sencillo el manejo). El cocido maragato es delicioso aunque potente. Un abrazo
ResponderEliminarJajaja Francisco, siempre tiene la palabra adecuada para arrancarme una sonrisa:)
ResponderEliminarHago lo puedo, y ya sabes el dicho: "Aprendiz de todo maestro de nada"
Gracias por los ánimos.
Bss
Hola Rafa, has estado bien cerca.
ResponderEliminarHablando de photoshop no lo utilizo porque no tengo ni idea:( no porque no me guste.
He visto fotos retocadas, cambiando de color bjetos decorados, paisajes y me encantan.
Pero aquí lo que quise decir es que el color de las casas me llamó la atención enormemente.
De hecho en la 7º foto saqué una máquina cementera o como se llame y a arena porque me ha parecido muy llamativo.
Un abrazo y gracias por el consejo.
Hola Katy. Que color más original tiene ese pueblo. El paseo y ha sido muy bueno y siempre nos cuentas algo que desconocemos.
ResponderEliminarDel cocido si he oido hablar mucho aunque nunca lo he comido... Y tú te comistes todo lo que vemos??, si así fue luego no te podrías levantar de la silla:))
Un beso.
Puedes sentirte feliz, de tener la oportunidad de pasear poe esas callejuelas hermosas y estar presente en tantos recuerdos vivientes del pasado.
ResponderEliminarLa mesa que nos ofreces es.....impagable!!!
Cariños
Hola Guapa:
ResponderEliminarUn pueblo que se ve agradable, sobretodo por la comida.
Todo piedra, todo rojo, todo impresionante.
Besote
Jaja Laura que graciosa. Éramos cuatro y se quedó la mitad:) Imposible hacerse con el.
ResponderEliminarEl pueblo es bellísimo desde luego. Merece la pena hacer una escapada.
Bss
Así es mi querida Abu, el paseo rematado con estas viandas es impagable. Y en buena copmpañía más.
ResponderEliminarBss y gracias por tu visita.
Hola Marqués parece que cobro comisión por recomendar la vista y el cocido:) Pero creo que merece la pena darse un paseo y disfrutarlo.
ResponderEliminarBss
Ummm!! ¡¡Qué buena pinta tiene ese cocidito tan típico de tierras leonesas!! Y el pueblo, que encantador con ese color en sus piedras que le da un toque tan especial!!
ResponderEliminarUn saludo!!
Hola C.G. Hoy habría sido impensable tomarlo con este calor. Cuando lo comimos hace 15 días hacía fresquete. El pueblo como ves se presta a la fotografía y a la pintura.
ResponderEliminarBss
No lo conocía Katy pero es precioso!
ResponderEliminarLo visitaré cuando pueda. es la ventaja de visitarte a ti. siempre un placer!
Precioso lugar para perderse del mundo urbanitas en el que vivimos. "Dichoso el que huye del mundanal ruido" y el que come un cocido maragato en sus tierras...
ResponderEliminarBesos
Hola José Luis , me alegro compartir gustos contigo. Merece la pena visitar Castrilloy pasar una tarde agradable paseando por sus calles. Es como traspasar el umbral de la historia.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Carmen te ha salido un comentario de lo más poético:)
ResponderEliminarUn cocido es un cocido, pero este tiene su encanto sin duda alguna.
Bss
Esa España Rural tan diferentea la urbanita. Muy buenas fotos buenos encuadres, hace no mucho necesitaba hacer para un trabajo unas fotos de ese tipo de comida. Mira que curioso y ahora las decubro aquí.
ResponderEliminarComento como anonimo por problemas con bloger soy:
http://ricardomarinaraluce.blogspot.com/
Hola Ricardo, se quien eres, porque soy seguidora de tu magnífico blog.
ResponderEliminarGracias por ese comentario tan positivo.
No suelo subir comidas en este blog salvo excepciones porque para eso está mi blog de cocina que llevo junto con mi hermana. Si te apetece pásate y me cuentas.
El pueblo muy singular. Me ha encantado.
Un abrazo
¡Qué bien lo cuentas! Conozco el pueblo y lo practico casi todos los años, desde hace muchos; aprovecho el otoño o el invierno para darme un paseín por estas tierras, y aunque el cocido lo suelo tomar en Santiago Milla no pierdo el pasar algunas horas en Castrillo. Y me gusta más en el otoño o el invierno porque hay menos gente, está más auténtico, los disfruto más y desdepués del mediodía hasta la caída del sol tiene una luz muy especial que contrasta con ese verde intenso de sus puertas.
ResponderEliminarGracias por este post tan bonito.
Un fuerte abrazo.
Hola Gaia, que alegría que conozcas el pueblo y me des la razón. Parecía que exageraba al contar la belleza de este pueblo. Afortunadamente ves que en el pueblo no había nadíe. Fuimos hace 15 días y estábamos practicamente solos. Por eso pude hacer estas fotos. Habrá que hacerte caso e ir en Otoño:)
ResponderEliminarBss
Katy Nuevamente me deleite con las bellas imágenes de tu post.
ResponderEliminarMil gracias Katy por estar siempre presente en mi blog, te invito a traer un regalo en http://mensajes-paraelalma.blogspot.com/2011/10/100-seguidores.html
Feliz fin de semana
Un abrazo
pd. La melodía de fondo bellísima!
Hola Katy
ResponderEliminarTampoco conocía este lugar. Parece como si el tiempo se hubiera parado y pudiéramos verlo tal y como era hace muchísimo tiempo. No me extraña que se sorprendiera. Un lugar muy especial y bonito.
Besotes.
Hola Rosa muchas gracias por tus palabras y por el regalo. Ahora en cuanto puedo me paso.
ResponderEliminarBss
Me alegro que te guste. Desde luego es como dices. El tiempo se ha detenido.
ResponderEliminarBss
siempre me han gustado esos pueblos de piedra,
ResponderEliminarantiguos, los visito cuando puedo.
un abrazo.
Gracias Ricardo por tu visita aunque mi blog no sea de piedra:) Me alegro que te gustara.
ResponderEliminarUn abrazo
Me alegro de verla, y contemplar esas maravillosas fotografías. España, que la conozco bastante, es una gran belleza en todos los sentidos , desde sus verdes prados hasta la tierra reseca de Aragón, todo tiene su encanto.
ResponderEliminarCon ternura
Sor.Cecilia
Espero que todos ustedes ya estén bien
Tiene razón Sor Cecilia España es bellísima y su diversidad la hace aún más hermosa. Cualquyier ricón es entrañable.Cuidese, Cuidémonos.
ResponderEliminarBss
Vamos a ver,leyendo comentarios sobre el cocido debo decir que la gente está mal informada.
ResponderEliminarComo buen maragato de pura cepa de Castrillo debo decir que el cocido se empezaba al reves,es decir,por la carne(lo bueno). Como el trabajo de arriero era muy ajetreado no siempre tenían tiempo,de ahi q dejasen la sopa para el final,para seguir con su camino con la barriga caliente
Saludos
Este es un blog personal en el que hablo de mis viajes y percepciones. No tiene carácter informativo ni es una guía. La información que he recogido además de degustarlo está en el blog del restaurante y del guía que nos llevó.
Eliminarhttp://www.castrillodelospolvazares.com/cocido-maragato/#alreves
Agradezco el comentario y la información. Un saludo
Cualquier otra duda preguntenla
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