Ir a Venecia y no visitar el Palacio es como no haber ido. Merece la pena pagar la entrada y disfrutar de las salas y de las pinturas de Tintoretto, Paolo Veronese entre otros. Su construcción se sitúa entre los Siglos X y Siglo XI. Ni que decir que es uno de los de Venecia y obra principal del gótico veneciano.
A principios del siglo XVI se añadieron las llamadas prisiones nuevas. Conectado al palacio mediante el "Puente de los Suspiros", cruzado por los condenados en su camino a las nuevas prisiones. O sea el puente de los suspiros de romántico tiene poco. Después de la caída de la República de Venecia en 1797 el palacio no se utilizó ya como sede de las magistraturas sino que fue acondicionado para albergar oficinas administrativas.
Una maravilla , gracias pro traerlo al blog . Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias Chelo. Gracias a ti por valorarlo🥰
EliminarBuen viaje cultural, en donde me gustaría perderme.
ResponderEliminarBuenas Noches.