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Escribir sobre Fátima desde un punto de vista turístico sin el sentido de la religiosidad que la impregna es casi imposible, ya que es un lugar venerado y de peregrinación para los católicos de todo el mundo. Es verdad que se puede visitar el lugar sin ser creyentes por su grandiosidad, monumentalidad, simbolismo y sobre todo por la espiritualidad que se respira en el lugar pero obviamente este no es el sentido último de ir a Fátima.
Basílica de Nuestra Señora del Rosario
El Santuario de Fátima como lugar de las apariciones de la Virgen de Fátima conocida también como Nuestra Señora del Rosario es un lugar en donde los católicos veneran a la Virgen María bajo esta advocación. El Santuario por tanto es un lugar de peregrinación, como otros tantos santuarios marianos en el mundo como pueden ser Lourdes, Medjugorje, Guadalupe por citar algunos.
Es uno de los santuarios más visitados por peregrinos de todo el mundo. Su fama cobró mayor relevancia durante el papado de Juan Pablo II, que se declaró devoto de la Virgen y agradecido de haber sobrevivido a su atentado visito el santuario en 1982. De hecho a la entrada hay una escultura del hoy San Pablo II venerado también por los fieles que acuden al santuario.
Torre de la Basílica de Nuestra Señora del Rosario
Cuando entras al Santuario lo mas llamativo es su descomunal plaza y al principio lo que intentas es ubicarte y te dices a ver por dónde empiezo ahora. Tu mirada te lleva al fondo en dónde se levanta la Basílica de Nuestra Señora del Rosario y su bella torre de 65 m de altura, rematada por una corona de bronce que termina con una cruz, iluminada durante la noche. 
La basílica se empezó a construir en 1928 y es de estilo neobarroco y fue consagrada en 1953 por Pio XII. Según te vas acercando te llaman la atención las columnatas a ambos lados del santuario
Interior de la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Fátima.
Las tumbas de los videntes, los hermanos Francisco y Jacinta Marto, se encuentran respectivamente en el extremo derecho e izquierdo del transepto. La tumba de sor Lucía se encuentra también en la Basílica del
Rosario, al lado de la tumba de Jacinta.
Capilla de las Apariciones
Basílica de la Santísima Trinidad
Una vez ubicada el camino te lleva a visitar la capilla de las apariciones en donde había una enorme cola de gente para entrar. En ella se encuentra la imagen original de la Virgen sobre un pedestal. Aquí es en dónde se dice que estaba la encina sobre la cual tuvieron lugar parte de las apariciones de la virgen en Cova de Iría a los tres pastorcillos Francisco, Jacinta y Lucia. La primera aparición tuvo lugar el domingo 13 de mayo de 1917 y la última el 13 de octubre de 1917
Estatuas de los pastorcitos canonizados Jacinta y Francisco Marto
Al final de la explanada se encuentra la Basílica de la Santísima Trinidad con 9.000 asientos
Se inauguró el 13 de octubre de 2007 y está consagrada con el título de Basílica menor.
Al fondo la Iglesia de la Santísima Trinidad
El interior es muy llamativo porque carece de columnas. Diáfano total y muy sobrio
Viacrucis y Calvario
Desde la rotonda sur de Fátima se puede comenzar la ruta del Viacrucis hasta el Calvario, camino que seguían los tres pastorcillos para ir de Aljustrel a la Cova da Iría . Consta de 15 pequeñas capillas, las 14 primeras corresponden al Viacrucis y la 15ª a la Resurrección de Jesús. En el último conocido como Calvario Húngaro, hay una capilla dedicada al rey san Esteban de Hungría. Las 14 capillas del Viacrucis fueron esculpidas por María Amélia Carvalheira da Silva y sufragadas ofrecidas por húngaros refugiados en Occidente. Todas inauguradas en Mayo del 1964, y la última la 15ª se inauguró el octubre del 1992, cuando Hungría quedó libre del Comunismo. Este era el camino que seguían los tres pastorcillos para ir de Aljustrel a la Cova da Iría
Calvario
Junto a la capilla de las apariciones me llamó la atención, una enorme hoguera en donde también había mucha gente aguardando portando velas. Como no entendí el motivo por el cual quemaban las velas lo indagué después y me quedo con este simbolismo y significado que me ha gustado y creo que la mayoría de personas desconocen. Primero es tanta la cantidad de velas que hay que no se pueden quemar por sí solas, son toneladas de las mismas cada día. Según se van derritiendo las velas, la cera acumulada aviva ese fuego símbolo de la fe. Las velas se consumen como nuestra vida, pero esa luz continúa en la vida eterna aunque nuestra vida se apague. Así mismo algunos creen ver en ellas el símbolo del bautismo y la responsabilidad del creyente de hacerla brillar a lo largo de la vida. Y cuando se deja atrás Fátima esa luz sigue ardiendo ahí
Una perspectiva, que no había visto en Fátima. Hace mucho que no voy. Construían la Basílica de la Trinidad.
ResponderEliminarFotos geniales.
Besote guapa
Me alegro que te haya gustado el post. Sin duda es uno de los santuarios más bellos del mundo. Un abrazo
EliminarEspero que para ti sea tan inolvidable como lo fue para mí.
ResponderEliminarUn fortísimo abrazo.
Es la tercera vez que voy y siempre vuelves con renovadas energías, Aquí los recuerdos no cuentan. Cuentan las vivencias. Cuidate que se que te tomas un respiro. 😊
EliminarEs imposible separar una cuestión de otra. yo estuve hace unos años allí y la visita fue bastante emocionante.
ResponderEliminarBesos
Efectivamente, Fatima es un lugar de peregtinación para los católicos. Aún sin ser creyente se respitra esa paz que deja la impronta de los que han pasado por allí. Un abrazo
EliminarConozco a bejaranos que van en peregrinación a Fátima una o dos veces al año, pero no he estado todavía. Tendré que ir algún día.
ResponderEliminarUn beso
Así es un lugar muy visitado. El año que viene se celebrará en Fátima el día Mundial de la Juventud. Gracias Carmen
EliminarHe visitado el santuario de Fátima. A mí mujer le encantó a mí no tanto. La razón estáclara, lo has dicho en la entrada. Un saludo.
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