La Ex-Colegiata de Santa María aspecto fortificado data del S.XIII y es de estilo románico de transición (entre el mundo románico y el gótico) con influencias cistercienses.
Fue instituida colegiata por el obispo Diego de Muros I en 1482, hasta 1840, año en el que volvió a ser iglesia parroquial. Las ventanas son románicas y adorna su fachada un rosetón románico. Fue restaurada en 1976.
Una Colegiata, también conocida como iglesia colegial, es un templo católico en el que se pueden celebrar los oficios divinos de la misma forma que se celebran en las catedrales a pesar de no tener esta denominación.
Su planta es basilical y consta de tres naves, con sus correspondientes ábsides rectangulares.
Contaba con un pequeño atrio que se destruyó, se eliminó el antiguo coro y su órgano situado en medio del templo que impedía la visión completa al altar mayor. En el año 1659 se construyó la sacristía en su parte exterior y en 1695 las capillas laterales. El retablo del altar mayor es de 1726, barroco y obra de Antonio del Villar.
Los capiteles de las columnas están esculpidos a bajorrelieve, con motivos vegetales sencillos, donde se muestran, sobre todo, volutas y diversas plantas.
En 1841 se trasladaron al atrio varios cruceros de distintos estilos dispersos por las calles de la villa
En la misma plaza junto la Colegiata se alza la Capilla dedicada al culto de Santa Liberata, hija de Baiona, virgen y mártir a muy querida por los habitantes de Baiona.
Se comienza a construir en finales del año 1695 por suscripción popular. De estilo italiano bastardo con reminiscencias del toscano y algunas mezclas del plateresco. En su fachada principal, flanqueada por dos torres adornadas con pináculos acabados en bola, destaca la imagen de la Santa crucificada. A ambos lados nos encontramos con dos escudos: el de Castilla-León y el de Baiona.
Santa Liberata es la primera mujer cristiana que sufrió martirio en una cruz. El altar mayor representa diversas escenas de su vida. Alberga así mismo una figura ecuestre de Santiago Apóstol, uno de los elementos de devoción jacobea .
Iglesia de Santa Cristina de Ramallosa (Sabarís, en Baiona)
No iba buscando la Iglesia sino el Puente de románico de Ramallosa y en mi camino me topé con esta iglesia por su llamativa torre. Por cierto estaba en obras y no había ni un alma. Estuve todo el tiempo sola en el recinto.
Por lo que he leído creo que esta parroquia existía en el siglo XIII en un documento como donación del Fernando IV al obispo de Tui, de donde se desprende que debía existir una antigua iglesia. La iglesia actual es de estilo ecléctico obra del arquitecto José F. Montes, año 1920. Su imponente apuntada del campanario con reloj es de estilo neogótico de principios de este siglo.
Esos paseos tuyos que tanto me gustan...
ResponderEliminarBesote guapa
Seguro, porque te traen buenos recuerdos. Te lo conoces bien😃
EliminarMuchas gracias Doc.
Esa luz de España ingresa a mis ojos a través de tus fotos, como siempre, bellas. Quedé deslumbrado con esos templos que en su desnudez pétrea guardan ese par de sorpresas doradas: el barroco estípite de los retablos mayores. Saludos desde el Perú.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario tan positivo. No es fácil hablar de iglesias y menos cuando no se es experta. Las fotos ayudan es cierto. Saludos😊
EliminarDespués de leer y ver las imágenes de la primera parte estaba seguro que las siguientes me iban a gustar también. Sobre todo por la cantidad de edificios, iglesias, antiquísimos la mayoría, que han resisitido el paso del tiempo, como, de nuevo esos soportales que ya vi en la primera entrada, que veo a usted también le han gustado mucho. Por cierto aunque sea de siglo XX, eso de estar un rato sola en la última iglesia que nos enseña está muy bien. Uno lo ve todo a placer, con una sensación especial. A veces, a mí, al menos, así me ha pasado.
ResponderEliminarUn abrazo, Katy.
Muchas gracias por tu comentario tan enriquecedor como siempre. Es el post que más me ha costado porque no soy experta en estos temas. Pero es cierto que las Iglesias me atraen no solo por su belleza,arte y expresiones de una época, sino también por la energía posoitiva que se siente en ellas. Siglos de fe que las que las personas han depositado en ellas. Ah y sí los soportales estaban al lado de mi alojamiento y me he detenido unas ciuantas veces en observarlos y pasar por ellos. Un saludo muy especial 😊
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